Boletín Informativo
Sin categoría / julio 21, 2005

Parece que fue ayer cuando empezamos con el proyecto ‘un día, un libro’ y ya son más de cien las reseñas publicadas en estas páginas. Seguiremos en la brecha hasta conseguir las 365. Gracias a nuestro posteador residente por su inestimable colaboración. Hace ya algún tiempo que comenzó el concurso del periódico 20 minutos, y me congratula anunciar que estamos en el tercer puesto de los blogs de cultura y tendencias, lo que nos conviertiría en finalistas si mantenemos esta posición. Gracias a todos por vuestro apoyo y ¡A seguir votando! El agobio de trabajo nos ha impedido empezar el proyecto liblit, pero desde ¡ya! marcamos la cuenta atrás; esperamos tener para septiembre montada la biblioteca, dar servicios de bitácoras, y un proyecto sorpresa que creemos bastante impactante. Sugerencias, ofrecimientos de ayuda y demás en el foro. Por ejemplo, nos vendría bien un listado de escritores ¿Alguien tiene alguno a mano? Y por último, por ser lo más importante, dar la bienvenida a este mundo a un nuevo lector potencial. ¡Y bien guapo! Les presentamos a Pol:

Enrique Martínez Peñaranda. Vázquez.
Ensayo / julio 21, 2005

Ed. sins entido, 2004. 78 pág. Un genio de los tebeos En una entrada reciente de su blog Francisco Herrera comentaba que tebeos como Maus de Art Spiegelmann pueden aspirar a la categoría de ‘Novela’ con más méritos que muchos de los superventas (y no miro a nadie). Mi padre es un gran amante de los tebeos, y a él le debemos mi hermano y yo esta afición que tantos placeres nos ha dado. Si hay un dibujante de comics que puede entrar en la categoría de mito, éste es Vázquez. No sólo por la cantidad y calidad de su trabajo, sino por la multitud de leyendas -o no tanto- que se dicen sobre su persona (cómo, por ejemplo, que era tan moroso como su personaje de Los cuentos del tío Vázquez). En este enlace pueden leer una biografía, y aquí pueden leer la entradilla del libro: Fue mucho más que su propio personaje. Un creador efervescente; un observador y un cronista meticuloso, terrible; un poeta de lo efímero, un enamorado de la vida. Un soñador, pero también un tremendo pragmático. Un creador, ya se ha dicho; pero hay que repetirlo. Rico, rápido, agrio, despiadado testigo de una época también…